Qué comer y beber antes (y después) de entrenar

Qué comer antes, durante y después del entrenamiento

Resolvemos la gran pregunta que todos nos hemos hecho alguna vez: ¿qué es recomendable comer antes, durante y después del entrenamiento?

Por Guille Galindo  |  14 Septiembre 2020

Salir o correr o hacer deporte no es tan sencillo como calzarte las zapatillas y ponerte a levantar peso o a batir marcas. Requiere de un conocimiento previo de la actividad para evitar lesiones, al igual que de todo lo que rodea a la práctica del ejercicio. Y con todo lo que rodea nos referimos desde la ropa que debes ponerte a la alimentación que debes seguir.

Con respecto a esto último, todo aquel deportista que se precie se ha hecho la misma pregunta alguna vez: ¿qué tenemos que comer antes y después del entrenamiento? Por suerte para vosotros, en Menzig Fit vamos a resolveros la duda y a aconsejaros sobre cómo combinar alimentación y entrenamiento para unos resultados más óptimos. Eso sí, una cosa hay que dejar clara. Esto no es una ciencia cierta, depende de muchos factores. Depende de si eres un deportista profesional o estándar, de si quieres adelgazar o ganar masa muscular, de tu constitución física... Vamos a enseñarte lo más recomendable para comer antes o después del ejercicio, pero es solo un punto más de una larga lista de tareas que debes seguir para lograr el objetivo marcado.

Qué comer antes del entrenamiento

Sobre la alimentación anterior al entrenamiento hay dos grandes bandos: los que prefieren entrenar en ayunas y los que necesitan comer algo antes de ponerse a hacer ejercicio. Y ambos, amigos, tienen razón. Lo bueno de entrenar con el estómago vacío es que tu cuerpo, al no haber energía a la que recurrir en su interior para darnos la fuerza suficiente, tira de la grasa acumulada, lo que hará más sencillo que podamos adelgazar. Si tu principal meta es perder peso, deberías probar esta alternativa. Sin embargo, corres el riesgo de cansarte o debilitarte mucho antes, llegando a marearte y protagonizando toda una escena inolvidable en el gimnasio.

En ese caso, lo mejor para aumentar la masa muscular es aportar energía a nuestro cuerpo, pero de una manera ligera. Para ello, nada como las proteínas y los carbohidratos. Del primer grupo podemos tomar huevos, yogur griego natural... En cuanto a los hidratos de carbono necesarios para la práctica deportiva, tenemos batidos de frutas, arroz, avena, quinoa... Como veis, hay muchas posibilidades donde elegir. Y eso sin hablar de los frutos secos, otro elemento más que aconsejable para antes del entrenamiento.

¿Y qué hay de los alimentos proteicos más enfocados en el deporte? Los snacks de proteínas entran de lleno en nuestro estómago y en nuestra recomendación, ya que son un alimento ligero con la cantidad necesaria de proteínas para afrontar lo que se nos viene encima. Los batidos de proteína en polvo son otra buena elección, siempre y cuando sean naturales, sin potenciadores ni productos artificiales. Prohibidos también los alimentos picantes, grasos o con un nivel alto de fibra, ya que perjudicarán a nuestro rendimiento.

Si vas a comer algo ligero antes de entrenar, hazlo una hora antes, más o menos. Como máximo, media hora. Si entrenas por la tarde y vas a comer en un restaurante, espérate entre dos y tres horas para entrenar. No haberte comido ese entrecot...

Por último, es importante acudir al entrenamiento lo suficientemente hidratado. Con esto no nos referimos a beber un litro de agua en la hora anterior, sino cuidar lo que bebes a lo largo del día. Dicho de otro modo: bebe agua y no alcohol o refrescos.

Qué comer durante el entrenamiento

Esta parte es más fácil. Durante la actividad física, simplemente ingiere agua cuando tu cuerpo lo necesite, pero sin llenarte. Para ejercicios más intensos o que superen la hora, echa mano de geles con hidratos y bebidas isotónicas que contienen las proteínas que te darán la fortaleza extra para acabar la rutina.

Qué comer después del entrenamiento

De nuevo, las proteínas y los carbohidratos, sin excederte para impedir que se conviertan en grasa, son la mejor opción. Alimentos ricos en proteínas como el pollo, el pescado o los huevos; o en carbohidratos como los garbanzos, los tomates o las espinacas, asentarán todo lo logrado en el entrenamiento. Los antioxidantes o las grasas saludables (frutos secos como las nueces) también combinan a la perfección con el ejercicio. Si buscas algo rápido y que te quite el hambre, los snacks o el plátano vuelven a ser una garantía segura. El potasio de esta fruta ayuda a prevenir calambres, así que ya sabes por qué lo utilizan tanto los deportistas.

Ahora que ya sabes qué comer y beber antes, durante y después del entrenamiento, aplícalo en tu día a día y ya verás cómo notas los resultados.

Artículos recomendados